La primera mitad de la estación primaveral es ideal para poner a punto tu jardín y disfrutar al máximo de su belleza. Aquí tienes algunos consejos.
La primavera es, sin lugar a dudas, un periodo del año inmejorable para disfrutar al máximo de tu jardín y de tu pasión por la jardinería.
Las temperaturas suaves características de estos meses son ideales para el crecimiento óptimo y floración de infinidad de variedades de plantas, lo que aportará a este espacio un colorido único.
Sin embargo, para garantizar que tu jardín luzca con el mayor esplendor posible, será más que recomendable que lleves a cabo algunas tareas relativas a su cuidado y mantenimiento una vez finalizado el invierno, y que hoy queremos repasar contigo:
- Para comenzar, será conveniente que analices la necesidad de renovar el sustrato de tus plantas, o añadir tierra en aquellas zonas en las que detectes que esta ha sufrido un mayor deterioro y pérdida de materia orgánica.
- Retira los restos de vegetación y maleza que se hayan podido acumular en tu jardín durante los últimos meses.
- Analiza la posibilidad de incorporar nuevas plantas en tu jardín, pero siempre respetando que todas cuenten con unas adecuadas condiciones de espacio y luminosidad, para garantizar así su crecimiento óptimo.
- Del mismo modo, dedica el tiempo necesario a la poda de tus setos y arbustos, para favorecer así su regeneración y permitir que crezcan con un mayor vigor y fortaleza durante las próximas semanas.
- Tanto si dispones de sistemas automáticos como si prefieres realizar esta tarea de forma manual, recuerda incrementar su duración y frecuencia del riego, ya que con el aumento de las temperaturas el nivel de evaporación será mayor.
- Por último, ten en cuenta que la primavera se caracteriza por ser un periodo en el que el riesgo de presencia y proliferación de plagas y malas hierbas también será mayor. Por eso, será indispensable que aumentes tu supervisión y te informes sobre los mejores tratamientos de sanidad vegetal para cada variedad y situación.
