El frío es uno de las principales amenazas para tus plantas de jardín durante el invierno. Aquí tienes algunos trucos para favorecer su protección.
El frío invernal es, sin duda, uno de los aspectos a los que es preciso prestar una mayor atención en relación al cuidado de tu jardín durante esta estación del año, debido a los daños que pueden provocar estas temperaturas extremas en la salud de tus plantas.
Por este motivo, una vez que hace unas semanas decidimos aprovechar este espacio para ofrecerte algunas recomendaciones que pueden ayudarte a favorecer la protección de tus plantas de jardín en invierno, hoy queremos detenernos en este aspecto de una forma más detallada.
Desde el Grupo Áreas Verdes de AEPLA te animamos a que pongas en práctica las siguientes actuaciones en el caso de que detectes que tus plantas pueden verse afectadas negativamente por los descensos bruscos de temperatura o el riesgo de heladas:
- En primer lugar, plantéate la posibilidad de envolver con materiales protectores aquellas plantas que se encuentren más expuestas al frío, así como los troncos de árboles jóvenes, para evitar así los efectos provocados por la contracción y dilatación de su corteza a causa de las variaciones de temperatura.
- Si decides llevar a cabo la medida anterior, hazlo preferentemente durante la noche y utiliza preferentemente materiales aislantes especializados o, en su defecto, barreras realizadas con cartón o tela, ya que el empleo de plástico puede generar un efecto de condensación excesiva y poner en peligro la supervivencia de la planta.
- Mantén en macetas aquellas plantas que tienen una mayor sensibilidad al frío, y al calor, para poder así modificar su ubicación en función de sus necesidades.
- En relación a la recomendación anterior, utiliza tiestos que cuenten con un tamaño suficiente para evitar que las raíces se encuentren comprimidas en su interior. Ten en cuenta que la tierra ejerce de aislante natural frente al frío y el calor, por lo que así estarán convenientemente protegidas de las temperaturas extremas.
- En el caso concreto de las plantas de hoja perenne y los árboles y arbustos que hayas plantado recientemente en tu jardín, una medida muy a tener en cuenta residirá en añadir una capa extra de mantillo, para proteger así sus raíces en el caso de que estas sean todavía excesivamente superficiales.
- Para finalizar, y como norma general durante estas semanas, evita la realización de un riego abundante justo antes del anochecer, ya que el agua acumulada puede transformarse en capas de hielo y afectar gravemente a la salud de tus plantas.
