La finalización del verano y el descenso paulatino de las temperaturas no debe implicar que dejes de prestar a tu jardín la atención que necesita en otoño.

Hace tan solo unos días que hemos dejado atrás el verano y estamos comenzando a cambiar el chip para adaptarnos a la llegada de la estación otoñal.

En este sentido, si bien el verano pasa por ser un periodo del año especialmente sensible y crítico en lo referente al mantenimiento y cuidado de tu jardín, debido principalmente a la marcada influencia de condiciones climáticas extremas como son las altas temperaturas y el notable incremento de la sequedad ambiental, será indispensable no caer en el error, en ocasiones bastante común, de bajar la guardia y no prestar a tus plantas la atención que necesitan.

Como cada estación, el otoño cuenta con sus propias características ambientales, que deberás tener presentes a la hora de contribuir a que tu jardín pueda lucir su máximo esplendor.

Por eso, como en ocasiones anteriores, desde el Grupo Áreas Verdes de AEPLA hoy queremos compartir contigo una reflexión sobre aquellos cuidados y consejos prácticos que pueden ayudarte a favorecer el cuidado y mantenimiento de tu jardín durante los próximos meses:

  • Para comenzar, el primer paso a tener en cuenta en cuanto a garantizar el buen estado de tus plantas de jardín durante el otoño residirá en revisar en qué medida ha afectado el verano a tus plantas y al suelo, para establecer un plan de acción dirigido a aquellos elementos que se han visto más afectados por el calor estival.
  • Asimismo, será importante adaptar tus hábitos de mantenimiento a los cambios ambientales que se producirán durante las próximas semanas, sobre todo en lo referente a la periodicidad del riego, para evitar que una humedad excesiva pueda llegar a ser contraproducente para tu jardín.
  • En relación al punto anterior, también debes tener presente que el incremento de la humedad propio del otoño traerá consigo un riesgo más alto de proliferación de plagas, hongos y otras enfermedades, por lo que la toma de medidas de prevención y detección temprana será esencial para evitar problemas en el futuro.
  • Del mismo modo, una vez que vayamos avanzando en la estación otoñal, si cuentas con setos, arbustos o árboles de hoja caduca en tu jardín será imprescindible que dediques una parte de tu tiempo a la retirada de hojas secas.
  • Esta práctica no solo es muy recomendable desde un punto de vista estético, sino que, además, tiene una gran importancia en cuanto al cuidado de la salud y equilibrio del suelo, sobre todo si se trata de especies vegetales que presentan una mayor acidez en la composición de sus hojas, y muy especialmente para asegurar el mejor estado de tus plantas bajas y césped.
  • Analiza también qué variedades de temporada pueden aportar un toque único a tu jardín, como pueden ser los bulbos otoñales que se adaptan a la perfección a unas temperaturas más bajas y que alcanzarán su máxima eclosión en primavera, como los tulipanes o los jacintos, por citar solo dos ejemplos.
  • Para finalizar, ten en cuenta que, como ocurre también con nuestros propios hábitos y comportamientos diarios, el mantenimiento de tu jardín es una actividad cíclica y proactiva, por lo que durante los meses de octubre y noviembre será el momento ideal para empezar a tomar medidas para la protección frente al frio de tus plantas, para que estén convenientemente preparadas para la llegada del invierno.

 

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