Si te estás planteando montar un huerto urbano en tu casa, o en una parcela adyacente, aquí tienes un resumen de los pasos a seguir.
Hace tan solo unos días aprovechamos este blog para mostrarte las múltiples ventajas que puede aportarte la decisión de montar un huerto urbano en tu propia vivienda, o en un terreno adyacente disponible.
No cabe duda de que a lo largo de los últimos años el aprovechamiento de espacios domésticos y urbanos para el desarrollo de pequeños huertos se ha convertido en una auténtica tendencia en nuestro país, y eso que un gran número de personas interesadas en esta iniciativa sostenible no se animan decididamente a hacer realidad sus deseos debido a la creencia de que su puesta en marcha implica un considerable esfuerzo.
En este sentido, sí que consideramos preciso aclarar que, aunque la puesta en marcha y mantenimiento de un huerto urbano requiere, como no podría ser de otra manera, de una parte de tu tiempo y de la dedicación necesaria para mimar y cuidar lo más posible tus cultivos, no supone, realmente, la necesidad de realizar tareas extremadamente complejas, como puedes observar si echas un vistazo a los pasos necesarios para su montaje, que pasamos a resumirte a continuación:
- En primer lugar, selecciona un lugar de tu vivienda que cuente con unas condiciones de luz y humedad adecuadas para la instalación de tu huerto, como puede ser una parte de tu balcón o una zona acotada de tu jardín. Siempre que sea posible, prioriza espacios soleados, relativamente protegidos del viento y las heladas y que no se encuentren en una zona de paso frecuente.
- Realiza una primera adaptación de la tierra que utilizarás como suelo de cultivo, asegurándote de que cuenta con los nutrientes necesarios para favorecer la germinación o, si no es así, aportándole los abonos necesarios para que presente las mejores condiciones posibles.
- Infórmate sobre la mejor fecha para la plantación de aquellos cultivos que más despiertan tu interés, u organiza una planificación temporal para adaptar su plantación con especies vegetales complementarias, con el fin de conseguir el máximo aprovechamiento de tu ‘pequeña explotación agrícola’.
- Del mismo modo, será conveniente que te documentes sobre los condicionantes y requerimientos que implica cada cultivo, para poder dedicarles el mejor cuidado posible optimizando, a su vez, tu tiempo.
- Recuerda la importancia de regar tus cultivos diariamente y preferiblemente al atardecer, de forma manual o mediante la instalación de sistemas de riego automáticos, que, aunque suponen una mayor inversión, siempre resultarán más cómodos.
- Lleva a cabo un seguimiento continuado de la evolución y crecimiento de tus distintos cultivos, consultando aquellas medidas que pueden ayudarte a favorecer su rendimiento y obtener los mejores resultados cuando llegue el momento de su recolección.
