Toma todas las medidas a tu alcance para prevenir la aparición de plagas en tu jardín en los meses invernales. Estos son nuestros consejos en este sentido.
En numerosas ocasiones solemos pensar, de forma errónea, que el frío y humedad propios de la estación invernal suponen una excelente defensa para la aparición y proliferación de enfermedades y plagas en tu jardín doméstico.
No solo existe una alta variedad de amenazas que muestran una elevada adaptación a las condiciones ambientales de invierno. También es esencial que tengas presente que a lo largo de esta estación muchas otras ya están presentes, y se encuentran en una fase de hibernación, o aprovechan los últimos días otoñales para depositar sus huevos, con el fin de que estos eclosionen a medida que las temperaturas sean más propicias.
Por todo ello, y teniendo siempre presente que la mejor protección posible reside en la prevención, desde el Grupo Áreas Verdes de AEPLA queremos compartir contigo algunos consejos que, si decides ponerlos en práctica, incrementarán notablemente la protección de tu jardín frente a la amenaza derivada de plagas, enfermedades y malas hierbas:
- Para comenzar con este repaso de las mejores medidas preventivas para proteger tu jardín doméstico, recuerda la importancia de retirar lo antes posible los restos de plantas y frutos que se encuentren en mal estado o puedan convertirse en un foco de atracción para plagas y enfermedades.
- Del mismo modo, en el caso de arbustos y árboles, supervisa el estado de sus distintas ramas, con el fin de detectar aquellas que presenten un deterioro acentuado o daños y proceder a su poda, ya que es precisamente en ellas donde las distintas amenazas encuentran un entorno más favorable para su desarrollo.
- También será muy recomendable analizar la salud del suelo de tu jardín, sobre todo en lo relativo a su riqueza orgánica. En el caso de que identifiques alguna deficiencia, plantéate realizar la aportación extra de nutrientes, siempre con el asesoramiento de un experto en este ámbito.
- Asimismo, y para finalizar, el invierno es una fecha especialmente propicia para la plantación de aquellas especies vegetales que, si bien no destacan por su belleza estética, son especialmente útiles como defensa natural para evitar la aparición y proliferación de plagas o contribuyen a la atracción de polinizadores y fauna auxiliar.